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El auge de las bajas dispara la demanda de detectives privados ante las sospechas de fraude

Estos profesionales han pasado a ser un recurso habitual que emplean tanto los despachos laborales como las empresas que se enfrentan a un juicio en el que tratan de evitar que el despido sea nulo y haya que readmitirlo.

A medida que se gana distancia, no cabe duda que la pandemia generó importantes cambios en el mercado de trabajo, como una gran rotación de los trabajadores más jóvenes o la extensión del teletrabajo. Si bien, también ha conllevado efectos adversos como el auge del absentismo y las bajas laborales que centra las preocupaciones de las empresas y al que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones no consigue dar respuesta. Entre las compañías también han crecido las sospechas de fraude y el recurso a los detectives privados ha pasado a ser habitual, lo que ha disparado la demanda de agencias especializadas en estos casos.

«La investigación privada es muy efectiva, las empresas lo saben y tienen muy controlado este aumento de las bajas laborales. En el caso de algunos clientes, hay hasta un 30% de la plantilla fuera por incapacidad» explica el socio director de Castellana Detectives, César Martín, a La Información. Este admite que cada vez son más las compañías que les contactan para encargarles una serie de investigaciones de trabajadores que sospechan que están cometiendo un fraude, con el objetivo de poder negociar o si se llega a juicio, presentar el informe oportuno con el que demostrar que se trata de un despido procedente por haber actuado con mala fe.

Aumenta la demanda de sus servicios

El aumento en la demanda de sus servicios también está muy ligado a los cambios en el perfil de las empresas y otros aspectos de la legislación, en los negocios familiares era más frecuente conocer cuál era el origen de la ausencia del trabajador. «Estos casos siempre se han investigado, es un servicio histórico de los detectives privados, pero antes el fraude era más visible, la propia empresa detectaba al empleado infractor. Hoy en día hay una sobreprotección de los derechos del trabajador y lo dificulta un poco más, además hay más supuestos en los que el despido puede ser discriminatorio y eso pone a la empresa en una situación de debilidad» aprecia este detective.

Estos profesionales hacen referencia al sector del transporte o el de la hostelería como los sectores económicos en los que detectan más fraudes, si bien subrayan que no es una práctica exclusiva de estas actividades. Ambos están entre los sectores que registraron una tasa de absentismo más elevada en 2023, del 8,2% en el caso del transporte y almacenamiento y del 6,7% en la hostelería, tras aumentar en casi un punto porcentual en los dos casos respecto al año anterior, de acuerdo con el último informe de Adecco. El ámbito de los servicios, el número de horas no trabajadas por incapacidad temporal rozó el 30% del total de no efectuada

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